miércoles, 29 de diciembre de 2010

HISTORIA DEL COLEGIO SANTA TERESA




Este año estamos celebrando el 75 aniversario de Nuestro Colegio, pero su historia comenzó mucho años antes, cuando MARÍA GAY TIBAU, en el año 1870, fundó el Instituto de Religiosas de San José de Gerona, ya que sembró en ellas el espíritu del servicio. Éste es el motivo por el que un día llegaron a un pueblo pequeño de Andalucía.  

Según consta en la Historia del Instituto, el Archivo Diocesano de Gerona y el Archivo Municipal del Ayuntamiento de Porcuna:
     Las  Hermanas de San José llegan a Porcuna, pueblo de la provincia de Jaén – la antigua OBULCO romana-, como respuesta a una petición del Alcalde D. José Santiago Quero, que asesorado por su hijo, el sacerdote  don Francisco Santiago Millán, y por la Junta regidora del Hospital de “San Benito”, dirigida a la Superiora General del Instituto religioso, Madre Elena Campmol, en la que le solicitaba personal para prestar servicio sanitario y religioso en el citado hospital.
     
    El hospital  venía funcionando desde el 8 de mayo de 1.901, pero la atención médico-religiosa a los enfermos era muy deficiente.

De viaje para Colombia y teniendo que hacer escala en el puerto de Málaga, el 13 de octubre de 1922 la Madre Elena recibe  en el vapor “Buenos Aires” que la tenía que trasladar, a las hermanas de don Francisco Santiago; con el resultado de un acuerdo firme para que envíe religiosas  al citado hospital.

    Tras su regreso a España en febrero de 1923, se inician los trámites precisos, previa a la obtención de las respectivas autorizaciones de los Obispos de Gerona, Monseñor Gabriel Llompart, y de Jaén,  Monseñor Manuel Basulto y Jiménez.

    Don Francisco Santiago Millán, sacerdote de Porcuna, escribe al Obispo de Gerona con fecha 21 de marzo de 1923, asimismo lo hace la Madre Elena, donde detallan las condiciones en las que vendrían las hermanas. Recibirían una habitación franca y amueblada en el Hospital, 290 pesetas mensuales, y se las ayudaría en los gastos de fundación y la limosna que les correspondiera por velas.

    El 27 de marzo responde Monseñor Llompart concediendo el permiso para la fundación. Las hermanas fundadoras que salen de Gerona para Porcuna son: Joaquina Ferrer, superiora, Joaquina Alum, Concepción Pujol, María Bruguer y Catalina Bota.

    Llegan a la estación de Villa del Río donde las esperaban don Francisco Santiago y los miembros que constituían la Junta del Hospital. Reciben a su llegada a Porcuna, una entusiasta bienvenida por parte de la población, que presidida por su alcalde, le expresan en nombre de todo el pueblo y del propio Ayuntamiento la satisfacción por  su venida.

    Es el día 31 de marzo de 1923 cuando se establece la Comunidad en el Hospital de San Benito y cuando se instala el Santísimo Sacramento en su Iglesia. San Benito era un conjunto de edificios formado por el hospital, la iglesia abierta al público y la cueva o aljibe, -donde la tradición cuenta que apareció la imagen  de nuestro santo patrón-todo ello al cuidado de la comunidad.
  
    La misión inicial de las hermanas consistió en velar a los enfermos, tanto en el Hospital como en las casas particulares. Fundaron una cocina económica para alimentar a los numerosos pobres, con ayuda del Ayuntamiento y de un grupo de jóvenes que con diversas actividades artísticas recaudaban fondos para la cocina.
  
    Al año siguiente, en 1924 dos jóvenes porcunensas postulan e ingresan en la Congregación, en el noviciado de Gerona: Dolores del Pino y Juana Alonso, a las que seguirán aquel mismo año, cuatro más y así sucesivamente y ya, en 1934 forman un grupo de treinta vocaciones salidas de Porcuna.

    En septiembre de 1935 comenzó la andadura de lo que con el tiempo pasaría a conocerse como el Colegio  “Santa Teresa”.
A petición expresa y reiterada del Párroco y de la presidenta de Acción Católica que según sus estatutos debían fomentar la formación en sus miembros, solicitaron formadoras a las Religiosas  encargándose las hermanas Dolores Displast y Ángela Matabosch, las primeras aulas se ubicarían en locales cedidos por la Acción Católica.

        El advenimiento de la guerra civil en 1936, hizo que se cerraran las aulas y las Hermanas se unieron a las del Hospital en el cuidado de los enfermos. En aquel momento las Hermanas eran: María Bruguer, superiora, María Jesús González, Ángela Caballé, Ángela Matabosch, Dolores Displast, Cristina del Río, Mercedes Ayats, Catalina Bota y la joven aspirante Úrsula Vivar.

     Terminada la guerra, el párroco, D. Ramón Anguita, les deja la sacristía de la parroquia para impartir las clases, ocupando más adelante un local del antiguo Convento de las Dominicas.

Había en Porcuna una casa amplia y confortable que pertenecía a una hermana de don Víctor Funes Pineda, religiosa de las Esclavas del Sagrado Corazón de Jesús en Granada. Los milicianos la habían incautado y establecieron en ella su centro, pero al entrar los nacionales, dicha casa fue convertida en cuartel de infantería y de caballería, pues contaba la casa con una torre que les servía de vigía. Acabada la guerra la casa fue desocupada, y aunque se encontraba en pésimas condiciones; una vez adecentada se ubicó en ella el hospital,  pasando a vivir en ella las hermanas.

En 1944, siendo Superiora la Hna. Antonia Algans,  el Instituto adquiere la casa que venía funcionando como Hospital-Colegio, sita en la calle Altozano, hoy, Alfonso XII. Continuaron prestando simultáneamente sus servicios. Se habilitó el primer piso para los enfermos y la Comunidad; la planta baja para el Colegio. Todo ello con mucha escasez e incomodidad.

        El 12 de  mayo de 1.948 se bendice el nuevo sagrario de la Capilla costeado por los bienhechores de la comunidad. (Cfr. Historia…p. 354). Con fecha del 13 de mayo, el Párroco, D. Rafael Vallejos, certifica que sólo el grupo de párvulos es mixto y que el resto son niñas.

El 12 de marzo de 1.950 es nombrada  Superiora la Hna. Jesús González Seco. (Cfr. Historia…p. 364). A su muerte ocurrida en Madrid, el 17 de enero de 1.981, el Diario Jaén, publicó el día 24 de enero una nota donde hablaban de ella en los términos más elogiosos, diciendo entre otras cosas que se había ganado el título de “madre”, a lo largo de los más de cincuenta años que vivió en Porcuna. Éste es el tratamiento habitual en el pueblo para todas las religiosas.

En 1951, según certifica el entonces alcalde Sr. Morente, las hermanas ofrecen enseñanza gratuita a unos 125 niños en el colegio de párvulos, considerando la labor que desarrollan de  “sumamente beneficiosa para la población, tanto del punto de vista docente como por la promoción moral y religiosa que imprime a la juventud” (Cfr. Historia…p.370).

 En 1958 el Ayuntamiento construye un nuevo hospital en las  “Casas Nuevas” o Ejido de Napoleón; quedando el edificio como residencia de la comunidad y colegio.

     Debido al mal estado en que se encontraba el local en que funcionaba el Colegio, la Madre Elena Campmol, solicita al Sr. Obispo de Jaén, D. Félix Romero Mengíbar autorización para levantar la comunidad en la ciudad de Porcuna en 1956. (Cfr. Historia… p. 391). Pero no será hasta 1958 cuando se inicien las obras de reforma del viejo caserón de la calle Altozano, 22. Obras que terminarían en el verano de 1960, haciéndose solemne inauguración del Centro el 14 de Julio, siendo bendecidos los locales por Monseñor Félix Romero Mengíbar y con la presencia del alcalde D. Manuel Peralta Bonoso y demás autoridades, como también de la Madre Elena Campmol y las hermanas que formaban el claustro de profesoras, cuya Directora era la madre Antonia Algans, así como  numerosos vecinos.

     En los sucesivos años, y conforme la sociedad iba avanzando y desarrollándose, y la asistencia sanitaria  era asumida como un derecho público  por la Administración, el hospital fue perdiendo  protagonismo hasta su total desaparición. La labor de las hermanas en este campo fue diluyéndose y su mayor atención se dirigió al campo educativo. El Colegio debió de ampliarse, pues ya no sólo asumieron la enseñanza primaria sino que se abrió a los estudios superiores, implantándose el bachillerato, aún cuando los alumnos tendrían que examinarse por libres en el Instituto de Jaén.

        En 1978 se terminó la reforma del inmueble para acoger 3 aulas de preescolar y  8 de E.G.B.

Actualmente es Centro Concertado de E. Infantil y Primaria.

        Nuestro homenaje y reconocimiento  a  las religiosas, maestras y maestros que han enseñado y formado cristianamente a niños/as y jóvenes de Porcuna.

        Esta labor que comenzó hace 75 años, la continuamos los que hemos tomado el relevo con nuestra Misión, Visión y Valores.

         Nuestras Religiosas, Hna. Francisca Sánchez, Hna. Inocencia Sadornil, Hna. Valentina Martínez y Hna. Casilda Martínez, hacen presente día a día, el Carisma de María Gay Tibau: "Aliviar el dolor y sembrar la paz". Participando activamente dentro del Colegio y fuera de él, llevando la Eucaristía a los enfermos, participando en el Consejo Parroquial y Liturgia, impartiendo catequesis, etc.


Los acontecimientos y datos que se relatan en este escrito se han extraído de:

  • “Historia de la Comunidad en el Santo Hospital de San Benito”. Escrito por la Hna. Felícitas Villares. Publicado en el Programa de San Benito de Nursia, Patrón de Porcuna. Año 2010.

  • “Presencia de las Hemanas de San José de Gerona en Porcuna”. Escrito por la Hna. Casilda Martínez. Publicado en el libro “100 Años Caminando. I Centenario del Templo Ntra. Sra. de la Asunción. Porcuna, 1910-2010”. 

  • Documentación facilitada por la Hna. Inocencia Sadornil.

                                                              
    

1 comentario:

  1. Hola a todos, soy María una paisana que os escribe desde la distancia, me ha encantado esta iniciativa del blog, ya que he podido recordar el maravilloso colegio de mi infancia, estas fotos me han llenado de nostalgia y de un gran cariño.

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